Hay muchas organizaciones
realizando loables acciones en pro de los niños, niñas, familias y comunidades,
casi por todos lados miramos rótulos donde se promueve determinado comportamiento,
promocionando en una parte del mismo a la institución que lo promueve, muchas
de estas instituciones no gubernamentales entran en conflicto con otras por la
duplicidad de actividades. Los habitantes de las comunidades intervenidas
tienen ante sí un panorama amplio de ofertantes, los que les ponen ante sí la
posibilidad que va desde disminuir la
desnutrición, hasta la curación de las enfermedades con los montes que hay en
sus comunidades, pasando con la mejora del sistema educativo y la organización
comunitaria. Al inicio de las irrupciones rurales, los habitantes se muestran
deseosos de participar, luego de manera paulatina comienzan a desligarse de las
tareas encomendadas para su mejoramiento.
Los empleados de las
organizaciones al observar el marcado desinterés de las personas y ver que los
procesos de desarrollo emprendidos no están dando los resultados esperados,
pierden el entusiasmo, y comienzan a decaer en sus intentos por mejorar esa
comunidad, poniendo su mirada en otra, que por el momento demuestra mas
disposición, encaminan hacia ella todo su arsenal de estrategias y metodologías,
hasta que los habitantes empalagados con tanta demanda de información y
beneficios recibidos se cansan de tanto trajín, y su desinterés termina
colmando los ánimos hasta ahora estables del equipo interventor.
La solicitud de informes por
parte de los donantes, obliga a los equipos encargados a realizar toda clase de
concepciones, para explicar los enormes avances que han obtenido, es cosa que
fueran a ver, lo que más se mira, son las obras de infraestructura, la gente
está alegre con su casita, con su letrina, con su fogón mejorado, etc. Alegremente
lo expresan: Hoy ya no somos los mismos, hemos alcanzado un desarrollo que no hubiéramos
imaginado de no ser por “Humanismo Cristiano”- mientras tanto sus vidas avanzan,
pero cuando mueren ya no son los mismos, sabían un poco más y compartieron con
el promotor: aquel aventurero, amable y un tanto servicial aunque a veces
enojado varón, que Dios quiso traer para que lo conociéramos.
El desarrollo social no es fácil,
son múltiples los factores que lo limitan, los cuales van desde la ignorancia,
la falta de voluntad, hasta la debilidad por falta de alimento, el
desconocimiento espiritual, pasando por
la incomprensión de los que tienen suficiente para vivir, el descuido
recalcitrante de los gobiernos, la inconsciencia de los que saben y no
comparten su conocimiento-(un montón de trabajadores ad honoren, con amplios
conocimientos en varias ramas que solo vienen al país a abrir el hocico, cuando
bien pudieran compartir, aunque sea un poco su conocimiento, pero que cuando
alguien les dice que les enseñe algo dicen que lo tienen prohibido-¿Qué vienen hacer
entonces?- ¿a reírse de nuestras desgracias, a paliar con su presencia nuestra
hambre?. Las Organizaciones no gubernamentales tienen un papel importantísimo que
por su trascendencia, no puede ser descuidado como lo han venido haciendo:
trabajar en la concienciación de los ricos y poderosos, a la vez que con los
pobres y oprimidos, pero vemos que solo se está haciendo en una vía, muchos
pobres han perdido ya la esperanza de que alguien les pueda ayudar, volviendo
nuevamente sus pasos a la desidia, negligencia y descuido que otrora imperaba allende
las colinas, montañas y collados de nuestra patria.
Es preciso reinventar el término “intervención”,
colocar a las personas correctas en los puestos para los que están capacitados,
evitar la improvisación, los resultados en papel y las exageraciones. Predicar más
con el ejemplo que con las palabras.
Saludos Jogly, tienes una muy buena concepción de desarrollo. Admiro tu dedicación a escribir, espero que DIOS te bendiga y mejore tu estado de salud, con la FE en él ya que es el único con no nos falla. Bendiciones para ti y tu familia
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