Describiremos la política social, de forma muy general, como
la suma de las acciones realizadas por el Estado para mejorar el bienestar de las
familias.
Esta definición incluiría programas de los tres órdenes de
gobierno (Central, estatal y municipal), así como de los tres poderes, ya que
incorporaría también actividades como la impartición de justicia o la
legislación sobre derechos a la salud o al trabajo, por ejemplo.
Sin embargo, por lo general, las discusiones sobre política
social se circunscriben a las acciones directamente relacionadas con la
producción, provisión o el financiamiento para la adquisición de satisfactores como
educación, salud o vivienda.
Delimitar el ámbito de las acciones públicas que se incorporan
dentro de la política social tiene ventajas analíticas, pues permite determinar
mejor el objeto de estudio, si bien es menester reconocer que los criterios
para definir lo que se incluye (y, por lo tanto, lo que se excluye) dentro de
la política social no son precisos.
La política social, por otro lado, puede ser vista desde la
perspectiva de la población a la que busca ayudar. Esto puede hacerse para todos
los programas o para un programa individual.
La población, a su vez, puede ser agrupada por región (urbano-rural
o norte-sur), por nivel de ingreso, por género o por alguna otra característica
que se considere útil, según los propósitos del análisis.
Cuando la división de la población se hace por el nivel de
ingreso, y cuando el énfasis se pone en la problemática de la población pobre,
conviene hacer una distinción entre la política social en general, y la
política para combatir la pobreza extrema en particular.
Claramente, la segunda forma parte de la primera, pero puede
haber políticas públicas clasificadas generalmente dentro de la política social
(por ejemplo, la adquisición de equipo para hacer investigaciones de
astrofísica en universidades públicas) que no tengan un beneficio para la
población pobre, al menos directamente. (Lo que no significa que no tenga
importancia científica)
Hay muchas cosas que atañen a la población en general y que
no están incluías en política social, un ejemplo lo constituyen las acciones
para el desarrollo de infraestructura hidráulica, estas rara vez se incluyen en
dichas políticas. Aunque el acceso al agua potable es un factor indispensable
para la salud.
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